PERSONAJES

EL PROTAGONISTA

Aarón acaba de ser nombrado el oficial más joven de la guardia del rey Herodes. Está emocionado y algo nervioso porque no quiere defraudar al gran Rey. Al llegar a palacio, le dan su primera misión: encontrar a un niño nacido en Belén, del que un grupo de rebeldes y unos extraños Magos de Oriente dicen que es el Mesías que ha de venir, el nuevo rey de Israel. Aarón tendrá que decidir a cuál de los dos reyes debe lealtad.

LOS REBELDES

Zabulón, un pastorcillo inocente, bobalicón y muy divertido, que está empeñado en demostrarle al mundo que es el mejor pastor de Belén. Pero esta Noche Santa descubrirá que la perfección no está en ser el mejor, sino en la sencillez del que lo hace todo por amor.

Los posaderos, charlatanes y malhumorados, pero de buen corazón. Como todo el mundo sabe, y ellos repiten incansablemente, la culpa de todo la tienen los romanos.
Que si el censo, que si la maldita orden de regulación del hospedaje…Es imposible que hubiera sitio en la posada. Pero allí, en el establo, viendo cómo se trataban aquel hombre y aquella mujer, todo cambió y se avivó en ellos el fuego de aquel primer amor que creían perdido.

El ángel que anuncia la Buena Nueva a los pastores está algo desorientado metido en un cuerpo y en un mundo ajenos. Y le escandaliza ver que el mundo no acoge a Dios que viene a salvarlos. Pero su amor por el hombre le llevará a luchar para que Aarón descubra los signos que Dios le da y sepa dar crédito, por encima de sus prejuicios, a los testigos que Dios le pone delante.

El borrico Moreno. Más tozudo que la burra de Balaán, cierto, pero un tipo muy sabio, que ha descubierto que Dios le ha dado al hombre un corazón que no acepta por buena cualquier cosa, solo la verdad. Menos darle a la perola y más escuchar ese deseo insaciable e infinito que hay en cada uno de nosotros. Esa es la guía para encontrar a Dios.

La estrella de Oriente, una vieja diva de los años 20 venida a menos. Su misión es indicar el camino al Mesías, cosa que aprovechará Aarón para descubrir dónde se esconden esos impostores. Aunque la respuesta no será la que él esperaba.

Judith, la mujer de Aarón. Gracias a su amiga Isabel, la esposa del famoso sacerdote Zacarias, conoce a la sagrada familia. Ese encuentro la ha cambiado por completo y le ha abierto los ojos. Luchará porque su marido descubra la verdad sobre ese niño y no lo entregue a Herodes. El Rey es un pobre hombre, que está cegado por el miedo. A pesar de las advertencias de su marido, ya no le teme a nada porque lo ha encontrado todo.

LOS MALOS

El rey Herodes el Grande. Rey impuesto por Roma, cruel y sanguinario. Ha embaucado a tres Sabios venidos de Oriente para que le revelen el lugar donde nacerá ese falso Mesías que hace peligrar su reinado. Pero los Magos, después de encontrar al Niño y, avisados por un ángel, no vuelven a Palacio. Herodes, enfurecido, ordena a Aarón que lo encuentre… o lo lamentará.

Los Consejeros del Rey. Son el poder en la sombra. Herodes no es más que un pelele en sus manos. Saben muy bien que ese Niño es el verdadero Mesías, aquel del que hablan las Escrituras, pero un Rey así, pobre e indefenso, no le conviene al pueblo.
Necesitamos un gran jefe de
Estado, alguien con más  poder y, por supuesto, que se deje aconsejar.